Estreñimiento infantil: causas, señales y cómo mejorarlo con la alimentación

¿Qué es el estreñimiento infantil?

El estreñimiento ocurre cuando el niño tiene evacuaciones duras, dolorosas o poco frecuentes. Es común y, en la mayoría de los casos, mejora con cambios en la alimentación y en las rutinas del niño.

Señales de que un niño está estreñido

• Heces duras o en bolitas.

• Dolor o esfuerzo excesivo al evacuar.

• Menos de 3 deposiciones por semana (en niños mayores).

• Abdomen inflamado o dolor.

• Manchas de heces en la ropa interior.

• Evita ir al baño por miedo al dolor.

• Señales de alarma (requieren consulta pediátrica):

• Sangrado, vómitos persistentes, pérdida de peso, falta de apetito o estreñimiento desde recién nacido.

Causas más comunes

• Baja ingesta de agua.

• Dieta pobre en fibra.

• Retención voluntaria (por miedo o vergüenza).

• Cambios en la rutina (escuela, viajes, estrés).

• Falta de actividad física.

• Algunos medicamentos.

• Alergias o enfermedades como hipotiroidismo o celiaquía.

Cómo mejorar el estreñimiento infantil:

1. Más hidratación

Ofrecer agua a lo largo del día.

Las necesidades aumentan con la edad, pero en general entre 4 y 7 tazas al día (incluyendo líquidos naturales) es adecuado.

2. Aumentar la fibra

Agregar gradualmente:

Avena

Frutas con cáscara (manzana, pera)

Papaya, ciruela, naranja, mango

Verduras verdes

Frijoles, lentejas

Pan y arroz integral

Chía y linaza

3. Evitar alimentos que endurecen las heces

Guineo verde

Zanahoria cocida

Manzana sin cáscara

Harinas refinadas

Embutidos y frituras

Arroz blanco en exceso

Quesos duros

4. Establecer un horario de baño

Sentar al niño 5–10 minutos en el baño después del desayuno, con un banquito para apoyar los pies.

Esto estimula el reflejo natural del intestino.

5. Fomentar la actividad física

Al menos 60 minutos al día de juego activo, correr, bailar, bicicleta o actividades al aire libre.

El movimiento ayuda al tránsito intestinal.

6. Probióticos y fibra soluble

En algunos casos el nutricionista o pediatra puede indicar probióticos específicos o suplementos de fibra (como psyllium o inulina).

No automedicar.

Conclusión

El estreñimiento infantil es muy común, pero no debe normalizarse. La hidratación, la fibra adecuada y una rutina de baño pueden marcar una gran diferencia. Si los síntomas persisten o hay señales de alarma, es importante buscar apoyo profesional.